CASO GENIE

Se trata de un caso representativo de los llamados niños ferales, y es probablemente uno de los más documentados.
Genie nació el 18 de abril de 1957. Vivía con sus padres, Irene y Clark Wiley, los cuales sufrían grandes discrepancias. Su madre sufría de ceguera a causa de las cataratas y un desprendimiento de retina. Su padre padecía depresión debido a un accidente de tráfico, y además maltrataba a su esposa. Existen especulaciones acerca de que tenía odio hacia los niños.
Genie nació con un peso normal, pero padecía una dislocación de cadera que le obligaba a llevar una tablilla en la misma. comenzó hablar tardíamente, a los 20 meses. Un médico familiar planteo que la niña poseía dificultades en el aprendizaje y un retraso mental. Su padre creyendo que las autoridades le quitarían a su hija, decidió protegerla de los peligros del exterior y proporcionarle un tratamiento doméstico.
Genie permaneció encerrada en una habitación hasta los trece años, en la que únicamente había una cama, ventana, silla y un orinal. No tuvo contacto con el exterior, ni con otra persona que no fuera su padre. Además, ella tenía prohibido emitir sonidos o hacer ruido alguno. Si lo hacía, su padre la golpeaba o le gritaba.
En 1970 Genie fue descubierta, se trataba de una niña que usaba pañal, miraba puntos indefinidos en el espacio y sostenía sus manos como si estuviera apoyada en una barandilla imaginaria, mientras emitía ruidos infantiles. De inmediato la niña fue puesta en custodia y los padres acusados de negligencia y maltrato infantil.
El caso de Genie tuvo una gran importancia por dos hechos: uno, científico, y el otro uno social. científicamente, daba la posibilidad de investigar el debate herencia-ambiente (si una correcta educción y un buen tratamiento conseguirían compensar los efectos de una infancia terrible) y si existían unos periodos críticos en las emociones y aprendizaje (los vínculos afectivos y la adquisición del lenguaje).
En lo referente al tema social, al poco tiempo de ser descubierta, se estreno la película "El pequeño salvaje".
Genie era una niña que no reaccionaba a los cambios de temperatura debido a que apenas estaba acostumbrada a llevar ropa. Además, al no haberse alimentado de sólidos no sabía masticar ni tragar. Debido al ´´maltrato`` que sufría, la niña suprimió la emisión de cualquier tipo de sonido y, escupía y salivaba sobre cualquier objeto que tuviera a mano.
Algunos de los comportamientos de Genie eran:
- Arañaba el suelo con una silla.
- Sus dedos rascaban los globos.
- Volcaba los muebles.
- Lanzaba objetos y los golpeaba.
- Arrastraba los pies.
Finalmente, a pesar de las numerosas investigaciones que se realizaron con el objetivo de mejorar tanto la conducta, como la expresión verbal de Genie (entre otras cosas) no surtieron efecto. Además, las numerosas casas de acogida por las que la niña paso no influyeron positivamente en ella

Belén Palacios